Hortalia Separador de Madera BF120 PH 40

El separador de madera está diseñado para funcionar como elemento divisor entre espacios, no como banco. La estructura incluye cuatro tubos que unen la jardinera a la parte superior, pero no está pensada para soportar el peso de personas sentadas de forma habitual.

Si se coloca una madera estrecha sobre la estructura, podría usarse de forma puntual, pero no es la función recomendada ni garantizada por el fabricante Hortalia. Para usos como banco, es preferible buscar productos específicamente diseñados para ese fin.

Ofrece cierta resistencia al viento gracias a su peso y estructura. Sin embargo, al ser un elemento alto y rectangular, puede comportarse como una vela en días de viento fuerte.

Para mejorar la estabilidad, es recomendable añadir peso en las jardineras, por ejemplo, colocando macetas con piedras o bloques de hormigón. Así se evita que el separador se mueva o vuelque. Esta solución es habitual en terrazas expuestas al viento.

La madera del separador está tratada en autoclave IV, lo que permite su uso en exteriores y contacto permanente con agua dulce. Para mantener un aspecto más vivo y natural, se recomienda aplicar una capa de lasur cada 24 meses.

Este tratamiento ayuda a proteger la madera frente a la humedad, el sol y los cambios de temperatura, prolongando su durabilidad y buen estado en ambientes exteriores.

El separador debe instalarse siempre entre dos jardineras Claustra, según las indicaciones del fabricante Hortalia. Incluye tornillería torx de acero inoxidable para asegurar la fijación y resistencia en exteriores.

El sistema es modular y permite diferentes configuraciones (en línea, en L, etc.), pero es importante seguir las instrucciones incluidas para garantizar la estabilidad y el correcto funcionamiento del conjunto.

En terrazas donde no se puede anclar el separador al suelo, la estabilidad se consigue añadiendo peso en las jardineras, como macetas con piedras decorativas o bloques de hormigón. Así se evita que el separador se desplace o caiga con el viento.

Esta solución es práctica y habitual en instalaciones temporales o en espacios donde no se permite fijar elementos al pavimento.